10 ene 2006

Me lo pones tan difícil...


Nos prometimos no dejar de ser nosotros. No dejar de hacer lo que quisiésemos en cada momento. No dejar que el uno cambiase al otro y viceversa. Nos queremos tal como nos conocimos. No nos lo dijimos nunca el uno al otro pero cada uno se lo prometió a sí mismo.

Pero ¿cómo hacerlo si reniego de todo cuando estoy contigo, si ninguna de las maravillas que hay ahí fuera lo es comparada contigo, si la luz más grande es oscura cuando miro a tus ojos y hasta el agua más pura es turbia cuando no la bebo de tus labios?

¿Cómo no voy a cambiar? Estaba enamorado del mundo hasta que llegaste tú. Ahora lo único que me queda es proponerte un trío con él y rezar para que te guste hacértelo con los dos.


No hay comentarios: